jueves, 26 de febrero de 2009

HISTORIA DE LA ROSA























1. Historia de la rosa




La rosa han sido desde la noche de los tiempos la reina de las flores.
Los primeros datos de su utilización ornamental se remontan a Creta (siglo XVII a. de C.).

La rosa era considerada como símbolo de belleza por babilonios, sirios, egipcios, romanos y griegos.

En Egipto y Grecia tuvo una especial relevancia, y mucho más en Roma.
Los romanos cultivaron la rosa intensamente, siendo utilizados sus pétalos para ornamento, así como la planta en los jardines en una zona denominada Rosetum.

Tras la Edad Media, donde su cultivo se restringió a Monasterios, vuelve a surgir la pasión por el cultivo del Rosal. Un ejemplo de esta pasión fue la emperatriz Josefina que a partir de 1.802 en su Palacio de la Malmaison llegó a poseer una colección de 650 rosales. Las colecciones de rosas se han multiplicado desde entonces.

Palacio de la Malmaison

Durante el siglo XIX empiezan a llegar variedades del extremo oriente, donde su cultivo fue también muy relevante por los antiguos jardineros chinos (existen datos del culti
vo de rosales 3.000 a.d.C). Con ellos llegan los colores amarillos.









2. Taxonomía y morfología de la rosa







Pertenece a la Familia Rosaceae, cuyo nombre científico es Rosa sp.
Los Rosales Antiguos son los que existían antes de 1.867, año en el que apareció el primer Híbrido de Té ('La France').
Los antepasados de nuestros rosales son otros rosales salvajes muy diferentes unos a otros. Pero a través de un proceso de selección y de continuas hibridaciones se están consiguiendo continuamente más y mejores variedades: colorido, profusión y duración de las flores, mayor resistencia a plagas y enfermedades, aromas intensos, etc.

En la actualidad la American Roses Society tiene clasificados mas de 30.000 rosales distintos.

Ramo de rosas (flor cortada)

Para flor cortada se utilizan los tipos Híbridos de té y en menor medida los Floribunda. Los primeros presentan largos tallos y atractivas flores dispuestas individualmente o con algunos capullos laterales, de tamaño mediano o grande.

Fragancia

Uno de las características más apreciadas de los rosales es su aroma. Estos alcanzan distintos matices, a limón, afrutado, almizcle, té o su característico olor a rosas.
Como norma general los Rosales Antiguos o clásicos son más olorosos que los modernos Híbridos de Té y Floribunda.

Color

Rosales modernos hay de casi todos los colores. En los Rosales antiguos hay una gama de color más reducida.
El color azul sigue siendo una leyenda ya que lo que hay son lilas pálidos.

Tipos de flores

- Flores sencillas: 4 a 7 pétalos.- Flores semidobles: 8-14 pétalos.- Flores dobles: 15-20 pétalos.- Flores muy dobles: más de 30 pétalos.

Frutos

Casi todos los Rosales antiguos poseen frutos atractivos en el otoño, de distintos tamaños y formas, de colores que van del rojo intenso al anaranjado.






3. Cultivo de la rosa



Sol al menos 6 horas al día. Generalmente han de encontrarse en lugares muy soleados, aunque es conveniente que tengan un poco de sombra en ciertos momentos del día.

La mejor situación es un lugar despejado, al sol, donde el aire pase fácilmente entre las ramas.

La circulación del aire es importante porque así hay menos hongos. Un rosal cerca de un muro o rincón más húmedo, con menos circulación del aire, es más propenso al ataque de hongos.

Resiste el frío, pero en climas con heladas fuertes es importante protegerlas en los meses más duros del año, envolviendo el tallo y las ramas con hojas secas, papel de periódico o algún plástico.

No son muy exigentes en cuando al suelo. La mejor es la tierra arenosa-arcillosa, profunda, permeable, con buen drenaje.

Buen riego y muchos nutrientes para que florezca con profusión. Al plantar rosas cerca de otras plantas, asegúrate que la competencia por los nutrientes y el agua no les afecte (abona y riega más).

En el caso de que la Rosa esté cultivada en una maceta, la frecuencia de riegos será mayor.

No mojar las hojas para evitar la aparición de hongos.

Algo fundamental para el correcto crecimiento de esta planta es realizar una poda dos veces al año, una drástica en invierno y otra en la época primaveral.

El primer año no hay necesidad de podarlos, sino que hay que hacerlo a partir del segundo año.

Además es fundamental eliminar las flores marchitas para que no consuman recursos que precisan los capullos que están por florecer.

Normalmente la multiplicación se realiza por injerto। Admite esquejes leñosos, semillas, acodo.


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HISTORIA DE LA ROSA








miércoles, 25 de febrero de 2009

AGRICULTURA DE ROSAS











GENERAL
IDADES








1.BOTANICA




Aproximadamente 200 especies botánicas de rosas son nativas del hemisferio norte, aunque no se conoce la cantidad real debido a la existencia de poblaciones híbridas en estado silvestre.

Actualmente, las variedades comerciales de rosa son híbridos de especies de rosa desaparecidas. Para flor cortada se utilizan los tipos de té híbrida y en menor medida los de floribunda.

Los primeros presentan largos tallos y atractivas flores dispuestas individualmente o con algunos capullos laterales, de tamaño mediano o grande y numerosos pétalos que forman un cono central visible.

Los rosales floribunda presentan flores en racimos, de las cuales algunas pueden abrirse simultáneamente.

Las flores se presenta en una amplia gama de colores: rojo, blanco, rosa, amarillo, lavanda, etc., con diversos matices y sombras. Éstas nacen en tallos espinosos y verticales.





2. MULTIPLICACION







La propagación se puede llevar a cabo por semillas, estacas, injertos de vareta e injertos de yema, aunque es este último el método más empleado a nivel comercial.

La reproducción por semillas está limitada a la obtención de nuevos cultivares.Las estacas se seleccionan a partir de vástagos florales a los que se le ha permitido el desarrollo completo de la flor para asegurar que el brote productor de flores es del tipo verdadero. Además, los brotes sin flor son menos vigorosos, por lo que poseen menos reservas para el enraizamiento.

Pueden utilizarse estacas con 1, 2 ó 3 yemas, dependiendo de la disponibilidad de material vegetal, aunque son preferibles las de 3 yemas, ya que presentan mayor longitud y más tejido nodal en la base, disminuyendo así las pérdidas debidas a enfermedades.

La base de las estacas se sumerge en un compuesto a base de hormonas enraizantes antes de proceder a la colocación en un banco de propagación con sustrato de vermiculita o con propiedades similares, con una separación de 2,5-4,0 cm entre plantas y 7,5 cm entre hileras.

Debe mantenerse una humedad adecuada y una temperatura en el medio de 18-21 ºC. En estas condiciones el enraizamiento tiene lugar a las 5-6 semanas, dependiendo de la época del año y de la naturaleza del vástago. Posteriormente se procede al trasplante a macetas de 7,5 cm o directamente al invernadero.

El problema de este sistema es que las plantas con raíz propia son bastante pequeñas y necesitan un tiempo considerable para que la planta crezca lo suficiente para que se comiencen a recolectar flores.

El injerto de vareta o injerto inglés, rara vez se utiliza para la producción comercial de flor de corte, ya que también requiere demasiado tiempo.

Para el injerto de yema el patrón más común es Rosa manetti y, ocasionalmente, R. odorata. En Nueva Zelanda se emplea R. multiflora inermis y en zonas más frías como Holanda, R. canina.

El material para los patrones se obtiene de plantas que han sido tratadas con calor para la eliminación de virus y otras enfermedades. A finales de septiembre se cortan los brotes largos de las plantas patrón, se les eliminan las espinas y se sumergen en una solución de hipoclorito sódico (1/3 de 1%) durante 15 minutos. Se cortan en segmentos de 20-21 cm y se quitan las yemas de las estacas, retirando todas las yemas inferiores, dejando tres en el extremo superior.

Después del tratamiento o desinfección del suelo, se procede al abonado de fondo previo análisis de suelo. Los tallos se tratan con hormonas enraizantes y plantan en surcos separados a 122 cm, distanciándolos a 13 cm, desde mediados de noviembre hasta mediados de diciembre, dando un riego inmediatamente después de la plantación.

El injerto normalmente se realiza a mitad de junio, cuando ya hay suficiente enraizamiento y la corteza se pude pelar fácilmente. Se practica una incisión en forma de "T" hasta la profundidad del cambium, bajo los brotes del patrón. Se inserta entre las solapas que forman la "T" la yema procedente del brote de un cultivar elegido, procurando un sistema de sujección por encima y por debajo de la yema.

Transcurridas 3-4 semanas se corta aproximadamente 1/3 del patrón por encima del injerto y se rompen las puntas, las cuales serán eliminadas 3 semanas después, cuando se extraen los patrones del suelo. Las plantas se limpian y se clasifican según su calidad (desarrollo del sistema radicular, crecimiento de la planta, etc.), se empaquetan y se almacenan en frío (0-2 ºC) hasta que se transportan al floricultor entre enero y junio.

En Holanda se emplea una técnica alternativa conocida como "stenting", que consiste en en injertar lateralmente el cultivar deseado sobre una estaquilla del portainjertos que se enraíza mediante los métodos normales de propagación.





3. CULTIVO





Con el cultivo de rosa bajo invernadero se consigue producir flor en épocas y lugares en los que de otra forma no sería posible, consiguiendo los mejores precios. Para ello, estos invernaderos deben cumplir unas condiciones mínimas: la transmisión de luz debe ser adecuada, la altura tiene que ser considerable y la ventilación en los meses calurosos debe de ser buena.

Además, es recomendable la calefacción durante el invierno, junto con la instalación de mantas térmicas para la conservación del calor durante la noche.











Para el cultivo de rosas el suelo debe estar bien drenado y aireado para evitar encharcamientos, por lo que los suelos que no cumplan estas condiciones deben mejorarse en este sentido, pudiendo emplear diversos materiales orgánicos.

Las rosas toleran un suelo ácido, aunque el pH debe mantenerse en torno a 6. No toleran elevados niveles de calcio, desarrollándose rápidamente las clorosis debido al exceso de este elemento. Tampoco soportan elevados niveles de sales solubles, recomendándose no superar el 0,15 %.

La desinfección del suelo puede llevarse a cabo con calor u otro tratamiento que cubra las exigencias del cultivo. En caso de realizarse fertilización de fondo, es necesario un análisis de suelo previo.











El índice de crecimiento para la mayoría de los cultivares de rosa sigue la curva total de luz a lo largo del año. Así, en los meses de verano, cuando prevalecen elevadas intensidades luminosas y larga duración del día, la producción de flores es más alta que durante los meses de invierno.

No obstante, a pesar de tratarse de una planta de días largos, es necesario el sombreo u oscurecimiento durante el verano e incluso la primavera y el otoño, dependiendo de la climatología del lugar, ya que elevadas intensidades luminosas van acompañadas de un calor intenso. La primera aplicación del oscurecimiento deberá ser ligera, de modo que el cambio de la intensidad luminosa sea progresivo.

Se ha comprobado que en lugares con días nublados y nevadas durante el invierno, podría ser ventajosa la iluminación artificial de las rosas, debido a un aumento de la producción, aunque siempre hay que estudiar los aspectos económicos para determinar la rentabilidad (Hasek , 1988).









Para la mayoría de los cultivares de rosa, las temperaturas óptimas de crecimiento son de 17 ºC a 25 ºC, con una mínima de 15 ºC durante la noche y una máxima de 28 ºC durante el día.

Pueden mantenerse valores ligeramente inferiores o superiores durante períodos relativamente cortos sin que se produzcan serios daños, pero una temperatura nocturna continuamente por debajo de 15 ºC retrasa el crecimiento de la planta, produce flores con gran número de pétalos y deformes, en el caso de que abran.

Temperaturas excesivamente elevadas también dañan la producción, apareciendo flores más pequeñas de lo normal, con escasos pétalos y de color más cálido.


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CULTIVO DE ROSAS














EL CULTIVO DE ROSAS:
BROTES BASALES









Los brotes basales son tallos vigorosos que se desarrollan en la base de la planta; constituyen la estructura del rosal y determinan el potencial para producir flores, se desarrollan a partir de yemas axilares que se encuentran dentro de las escamas de las yemas ubicadas en la base de la planta.

En general existen seis o siete yemas basales potenciales que son secundarias dentro de la yema utilizada en la propagación, en la mayoría de los casos solo las dos yemas inferiores entre las yemas potenciales producen brotes basales (Duys y Schouten, 2001).

Para que la brotación tenga lugar es necesario que las condiciones nutricionales, hídricas y ambientales a las que esté sometida la planta sean favorables (Van Der Berg, 1987). Se considera que una yema ha brotado cuando tiene una longitud de 10 milímetros y está en crecimiento constante.

La rosa es una planta exigente en oxígeno, una mala aireación del suelo o del sustrato produce una reducción en la producción por asfixia de las raíces (Abad y Noguera, 2000.

La cantidad de hojas es un factor determinante para la producción de la rosa, y por esta razón el doblamiento de los tallos o “agobio” se ha convertido en parte esencial de la producción de esta flor durante los últimos años, ya que permite aumentar el área foliar.

Los tallos son una fábrica de crecimiento vegetal, debido a que en las hojas se forman azúcares a partir de CO2 y H2O, los cuales son utilizados por la planta para su desarrollo (Duys y Schouten, 2001). Materiales como turbas, fi bra de coco, perlita, escoria, cascarilla de arroz, puros o en mezcla fueron los primeros sustratos utilizados en Colombia.

La cascarilla de arroz por su bajo costo es el sustrato más utilizado, posee una excelente aireación, pero su retención de agua es baja (Castrillón, 2000). La cascarilla de arroz son lemas, paleas y glumas del subproducto de la industria arrocera y se encuentra con alta disponibilidad en el país, en el mercado se puede conseguir en diferentes grados de tostado dependiendo del gusto del cultivador.

La cascarilla se considera un sustrato orgánico y reactivo por su pH entre 7,5 – 9,0 , debido a los óxidos derivados del proceso de quemado, valores a los cuales la disponibilidad de la mayoría de los elementos se ve afectada. Además, presenta poca capilaridad lo que afecta el movimiento horizontal del agua, cuyo movimiento dentro de la cascarilla quemada se da en sentido vertical (Pizano, 2000; Ramírez 2000).

Según Ramírez (2000), la cascarilla presenta unos inconvenientes ambientales que se deben analizar, debido a que se obtiene de quemas sin control a campo abierto originando emisiones atmosféricas, actualmente se desconoce su influencia sobre los suelos en donde se utiliza y el destino final del material cuando se convierte en un desecho.

La espuma termoexpandible (oasis), posee unas características ideales para el crecimiento de diferentes especies vegetales, tiene una capacidad de retención total de agua del 78%, sin embargo, posee una capacidad de aireación del 18%, considerada baja.El oasis ha sido empleado en la propagación sexual y asexual de especies ornamentales, como el clavel.


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